Este Día Mundial de la Diabetes, abordamos la prevención y el manejo de la diabetes tipo 2, destacando la importancia de un tratamiento temprano y efectivo para evitar serias complicaciones.
Y es que esta enfermedad, que se entrelaza estrechamente con la obesidad, no solo afecta el cuerpo, por lo que es esencial un enfoque proactivo y multifacético, abarcando desde cambios en el estilo de vida hasta la posibilidad de una intervención quirúrgica innovadora que controle la insulina en sangre.
En primer lugar, hay que poner atención a los síntomas porque nos pueden servir de aviso para que se instale de forma dramática en nuestro cuerpo y por tanto no haya consecuencias graves en la salud cuando no se han atendido o prevenido. Porque una sed excesiva, fatiga, visión borrosa y cicatrización lenta de las heridas son alarmas que no deben ignorarse, ya que los peligros de no tratar la diabetes son severas.
Y es que las consecuencias pueden ser devastadoras, desde enfermedades cardiovasculares hasta daño renal y problemas de visión. Por ello, el diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado son esenciales para prevenir estas complicaciones. Pero la lucha contra la diabetes tipo 2, especialmente cuando está vinculada a la obesidad, ha encontrado un poderoso aliado en la cirugía metabólica, como el Bypass Gastroileal. De hecho, la cirugía metabólica se ha convertido en una parte estándar del manejo de la diabetes, reflejando un cambio histórico en el enfoque del tratamiento de esta enfermedad crónica y compleja.
El Dr. Resa además nos aporta una perspectiva crucial sobre el bienestar general como es la regularidad en los horarios de comidas y sueño es vital, porque perturbar el reloj circadiano del cuerpo puede tener consecuencias graves, como un mayor riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, obesidad y otras enfermedades metabólicas. Al mismo tiempo, una alimentación desordenada junto a patrones de sueño irregulares pueden desincronizar nuestro reloj hepático, esencial en la regulación de la glucosa, lo que puede ser un precursor de enfermedades metabólicas.
En línea con estos hallazgos, se recomienda la regularidad de horarios y hábitos alimenticios para la prevención:
- Establezca horarios fijos para las comidas para ayudar a regular el reloj circadiano del hígado, crucial en el control de la glucosa.
- Evite picoteos entre horas para prevenir picos innecesarios de glucosa y mantener el ritmo metabólico adecuado, especial cuidado con los picoteos nocturnos.
- Mantenga un horario de sueño regular, apuntando a unas 8 horas por noche para alinear el reloj circadiano central con los periféricos.
- Gestione el estrés, practicando técnicas de relajación o meditación para mejorar la calidad del sueño y la regulación hormonal relacionada con los ritmos circadianos.
Estos pasos ayudan a sincronizar los relojes internos del cuerpo, lo que puede ser particularmente beneficioso para personas con diabetes tipo 2 y obesidad. La implementación de estas pautas, junto con las terapias médicas apropiadas, como la cirugía metabólica, puede ofrecer una estrategia integral y efectiva para el manejo de estas condiciones.
Y es que, la cirugía metabólica, y en concreto el bypass gastroileal, una variante del bypass gástrico, ha emergido como un faro de esperanza para aquellos que luchan contra la diabetes tipo 2 asociada a la obesidad. La American Diabetes Association (ADA) ha reconocido la cirugía metabólica como una opción de tratamiento recomendada para ciertos individuos con diabetes tipo 2, reflejando un cambio significativo en la percepción médica del papel de la cirugía en la gestión de esta enfermedad. Estas directrices, respaldadas por la evidencia científica, afirman que la cirugía no es solo para aquellos con un IMC mayor de 30, sino que también puede ser apropiada para pacientes con un IMC menor cuando la diabetes no se controla adecuadamente con terapias convencionales. Esta validación por parte de una entidad tan influyente como la ADA marca un hito en el tratamiento de la diabetes y subraya la cirugía metabólica como un paso adelante en la lucha contra esta condición crónica.
Además, la ADA insiste en la importancia de que la cirugía metabólica se realice en centros especializados con equipos multidisciplinarios que entiendan profundamente la diabetes y la cirugía gastrointestinal. Esto subraya la necesidad de un soporte a largo plazo y monitoreo de los pacientes, asegurando una recuperación y adaptación postoperatoria exitosas. Por eso un manejo integral implica estar atentos a las complicaciones que la diabetes puede acarrear y actuar a tiempo para prevenirlas.
Precisamente, en Zaragoza, el Dr. Resa y su equipo Unidad de Cirugía Laparoscópica de la Obesidad y el Metabolismo de la Clínica Montpellier son pioneros en este tratamiento, ofreciendo no solo cirugía sino también un seguimiento comprensivo y personalizado.